A menudo nos encontramos en consulta a pacientes que comentan que cuando han acudido a su médico de cabecera y le han contado que tenían malestar relacionado con salud mental, les han recetado medicación (ansiolíticos o antidepresivos son los más comunes). También en numerosas ocasiones los/las pacientes refieren haber dejado esa medicación porque no les hacía sentir bien.
Por otro lado, existen personas con problemas de salud mental grave o más extendidos en el tiempo que necesitan medicación durante varios meses o años y a lo largo de esos períodos comienzan a notar una reducción en el efecto o cambios en los efectos secundarios.
En todos los casos en los que una persona va a tomar medicación es fundamental la psicoeducación. Esto quiere decir que es extremadamente necesario tanto conocer cuál es nuestro problema, cómo se manifiesta y qué puedo esperar a lo largo del tiempo, como conocer el mecanismo de acción del medicamento que me han recetado. Si el/la profesional no nos lo explica de antemano, hay algunas preguntas que pueden resultarnos útiles para informarnos, como pueden ser:
- ¿Cuál es el mecanismo de acción de este medicamento?
- ¿Cuáles son sus efectos secundarios?
- ¿Cuándo empezaré a notar los efectos beneficiosos del medicamento?
- ¿Cuándo sería necesario que revisase la dosis o el tipo de medicamento con el profesional correspondiente?
- Si quiero dejar de tomar este medicamento, ¿hay alguna pauta?
- ¿Puedo experimentar adicción física/psicológica?
La psicoeducación es fundamental en cualquier proceso relacionado con la salud mental y es responsabilidad de los/las profesionales, así que no dudes en preguntar.